27 febrero 2013

Montevideo

Para ser del todo honestos, nosotros no habíamos previsto inicialmente hacer una parada por Montevideo. De lo que pudimos leer en nuestras guías de viaje la ciudad no tiene un gran interés turístico  Pero en vista de que en Argentina impusieron un control de cambio (como todos los venezolanos sabemos, eso hace que sea mucho mas rentable llegar con dolares en efectivo y cambiarlos que sacar dinero del cajero) y que en Uruguay es posible sacar dolares de los cajeros, decidimos que valía la pena pasar algunos días. 

Además tuvimos la suerte de que mi mejor amiga, mejor conocida como Machiste, tiene una tía que vive allá que aceptó gentilmente de alojarnos por esos días, super simpática :)

Así pasamos 3 días de intenso calor en casa de la Sra. Yolanda, el Sr. Eduardo y su hijo Sebastian -a los que agradecemos de corazón por su hospitalidad y atenciones- y paseando por la capital uruguaya que nos pareció mas una ciudad tranquila de provincia comparada a las metrópolis brasileñas que veníamos visitando. La ciudad tiene un cierto encanto y también un par de cosas lindas para visitar. 

El centro de la ciudad es bien lindo aunque lo sentimos un poco solitario (hay que decir que estábamos en plenas vacaciones de verano donde 80% de la ciudad aprovecha para irse a las playas).









Pero sobre todo apreciamos dos cosas: 

- la visita al Teatro Solis, recién restaurado y precioso. Algo que nos pareció interesante es que tienen tarifas accesibles para que todo el mundo pueda asistir a las presentaciones, organizan también viajes de pueblitos de la provincia a la capital para pasar el día en el teatro y hasta tienen una sala pequeña donde hay una escuela de teatro y desarrollan el talento local.





- un almuerzo bien agradable en un local del mercado del puerto con: rica carne, 2 botellas de "medio-medio" (una especialidad local: mitad de vino tinto y mitad de vino espumante) y conversaciones simpáticas (con un poco de ayuda del alcohol) con nuestros vecinos argentinos y el mesonero. Llegó el momento en el que hablaron de fútbol y el mesonero después de saber los orígenes húngaros de Laszlo comenzó a contarnos del "mejor partido de fútbol de la historia: la semi-final del mundial de 1954 entre Uruguay y Hungría" haciéndonos un resumen detallado. Bien gracioso!


la primera botella de medio-medio


Próximo post: nuestros 20 días de descanso y disfrute en Buenos Aires!

23 febrero 2013

Resumen Brasil

Algunas cifras:
- numero de días : 88
- distancia recorrida: 12 000 km (mas o menos 2800 en barco y el resto en bus)
- gastos por día por persona : 29,9 €
- numero de fotos tomadas: 2568


Carta del recorrido:



Lo que preferimos:
- La hermosa playa de Alter do Chao y la caminata por la Floresta de Tapajos

- Los días entre amigos a Manaus
- Los maravillosos jugos de frutas amazónicas y brasileñas, una delicia
- Los paos de queijo y la guaraná de los que nos volvimos completamente adictos
- El hermoso paisaje en las dunas de Lencois Maranhenses
- El paseo en bote por las playas de Recife
- Las playas paradisíacas de Itacaré
- Todas las especialidades regionales que probamos: el bolo de rollo de goiabada de Recife, la goiabada con queijo de Ouro Preto, el acaré de Bahía, el churrasco gaucho de Porto Alegre, etc.
- Por supuesto, Rio
- Las increíbles cuevas y paisajes del parque Chapada Diamantina

Lo que no nos gustó:
- Que no hayamos previsto con tiempo los días especiales (Navidad, Año Nuevo y mi cumpleaños) y sentir que hubiera podido ser mejor

- En los barcos en Amazonas, la gente que botaba por la borda basura al río o comida a los pobres 
- Lo poco considerados que son algunos brasileros que viajan en bus: escuchan música a todo volumen  hablan super fuerte a altas horas de la noche y dejan el bus como un basurero
- La manera alocada de conducir que tienen los choferes de buses en las ciudades.
-

Lo que lamentamos:
- No haber visitado Ilha Grande y Parati por culpa de la lluvia y que haya llovido tanto durante nuestros días en Rio
- No haber pasado año nuevo en la playa al darnos cuenta muy tarde de que había que reservar
- Que la visa en Brasil sea tan corta y que el país sea tan grande que, una vez que estas en el la costa, las fronteras para renovar la visa se encuentren a varios días de trayecto en bus.

Nuestros mejores encuentros:
- Nuestro querido amigo Aldo, al que conocimos en el amazonas peruano pero con el que compartimos más en Manaus

- Nuestros amigos de Santarém: el fotógrafo Spag y los suizos Yann y Nathalie de Neuf ;)
- Los increíbles couchsurfers Luciano (Natal) y Bruno (Porto Alegre) que tuvimos la suerte de conocer y compartir unos fabulosos días con sus amigos y familia
- Ver de nuevo a nuestros amigos de Francia: Nicole, Otavio y Rosangela; y haber podido también disfrutar de unos días increíbles con ellos y sus amigos
- La pareja de italianos que conocimos durante nuestro tour en Lencois Paola y Tullio con los que nos comunicamos en un itañol algo original

Los momentos "difíciles": - Los días sin poder sacar dinero del cajero en Jericoacora
- Las 54 horas de bus que tuvimos que tomar para poder llegar a Ouro Preto
- Pasar 4 horas tratando de resolver el problema con nuestro hotel en la Chapada Diamantina y terminar con un sentimiento de que nos estafaron
- Ser tratados como adolescentes por el tipo de la recepción en el hostel Praia do Forte

20 febrero 2013

Porto Alegre

Reflexionamos bastante sobre donde debíamos hacer nuestra ultima etapa en Brasil. Finalmente conseguimos un couchsurfeur dispuesto a albergarnos en Porto Alegre. Nos dijimos que seria la mejor manera de terminar estos 3 meses y así fue! Bruno nos recibió como reyes y pasamos 3 días increíbles con el y sus amigos, todos extremadamente simpáticos.
Desde nuestra llegada nos entendimos super bien y discutimos toda la noche (en nuestro portugués que termino siendo no tan mal según él) de todos los temas existentes. Además la ciudad nos recibió con una magnifico atardecer para darnos la bienvenida. 


A la hora de acostarnos Bruno nos explica una regla del apartamento. Cuando el alberga a una pareja, él es el que toma el sofá y les deja su cama matrimonial. Tratamos de protestar pero nada que hacer, no logramos convencerlo. Que recibimiento!


Porto Alegre no es una ciudad super turística pero tiene sus encantos. Hicimos un tour por el centro de la ciudad en medio día guiados por Bruno.

- El Mercado





- Las lindas calles 






- Un antiguo banco transformado en museo


antigua caja fuerte convertida en restaurante

- y otros edificios de los que olvidamos el nombre











- las viejas librerías 





















En la noche él nos preparo un churrasco gaucho con sus amigos (los brasileros de esta región también se hacen llamar gauchos, como los argentinos). Nos preparo unas bellas piezas de carne en lugar de los chorizos raros que uno come en Francia con Barbara, Barbara y Sergio. Ambiente super cool y preguntas graciosas como: "que hacen en Porto Alegre??? No hay nada que hacer aquí!".









El sábado quisimos ir a ver el pré-carnaval. Habíamos visto en internet. Bruno nos dijo que ya de por si el carnaval en Porto Alegre no era así como que super conocido y que el jamas había oído hablar del pre-carnaval. Decidimos igual darle su chance y la verdad hubiéramos debido escuchar a Bruno. Nos topamos con un grupo de 30 personas de los cuales la mitad vendía perros calientes.
Así que finalmente nos juntamos con Bruno y sus amigos en el parque donde nos dieron un curso de "slackline". Pudimos demostrar nuestra ausencia de equilibrio.

con ellos todo parece muy simple









Luego Sergio y Barbara nos llevaron a hacer un tour en carro por Porto Alegre. Después de habernos mostrado el puerto y tratando de llevarnos a un mirador, Sergio se equivoco de camino y nos encontramos en medio de una (pequeña) favela. Todos nos dimos cuenta (es extraño toda esa gente que se nos queda viendo...) pero nadie decía nada, nosotros porque estábamos asustados pero esperábamos que ellos supieran a donde iban y ellos... porque también estaban asustados! Nos dimos cuenta de que ellos nos estaban muy tranquilos cuando Sergio dando medio vuelta con el carro casi se lleva un árbol y bajo rapidisimo la callecita. Un poco de adrenalina.
Bueno finalmente llegamos al mirador y pudimos apreciar Porto Alegre en pleno.







esa misma noche nos fuimos a un bar simpático con los amigos.





Antes de irnos preparamos unas crepes para agradecerle por todo (y también porque nos hacían falta) que compartimos con otro amigo de Bruno que acababa de llegar de Paris. Intentamos convencer a Bruno de venir a vernos en Chile un mes mas tarde para hacer varias caminatas. El lo pensó seriamente pero ya era muy tarde para conseguir boletos de avión baratos. Será en otra ocasión. Una cosa es cierta, nos encantaría volver a verlo uno de estos días. Nos hicimos un amigo en Porto Alegre.



Y listo, se acabaron nuestros días en Brasil. Muy pronto, el resumen de estos 90 días en nuestro próximo post.